Lo que debes preguntarte antes de inyectarte bótox
Mar 13, 2024- El bótox es un procedimiento que evita el movimiento de ciertos músculos de la cara para que la apariencia sea rejuvenecida.
- El deseo de inyectarse bótox proviene del corazón
- La mente, es decir, tus pensamientos se llenan de razones para hacerlo sin considerar la Palabra de Dios
- Como nueva criatura, damos gracias a Dios por cómo nos ha creado y el propósito por el cual lo hizo: para su gloria.
- Necesitas tomar en cuenta cuatro principios bíblicos antes de tomar la decisión de inyectarte bótox
- Tu corazón, si es por vanidad. Tu dinero, si es prioridad. Tu esposo, si estás casada. Y lo que Dios dice acerca de tus motivaciones.
- Al final, este cuerpo dejará de ser. No podemos evitar la vejez porque es el proceso natural en este mundo.
- Escoge estar en contentamiento con como Dios te ha hecho, porque la verdadera belleza inicia en el corazón. ¿Cuánto lo cultivas con la Palabra?
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Lo que debes preguntarte antes de inyectarte bótox
El hombre creado a la imagen de Dios ha sido dotado, como ninguna otra criatura en la faz de la tierra, con inteligencia, con la habilidad de crear a partir de lo que Dios ha hecho. Es increíble todo lo que el hombre ha inventado, la luz eléctrica, teléfonos para comunicarnos con personas de otros países, el internet y la tecnología que facilitan procesos de vida, descubrimientos de medicinas para enfermedades, entre otros. Pero, ¿esto afecta su alfa o corazón? Las soluciones que el hombre crea para el alma deben examinarse a la luz de quien lo creó: Dios.
Mi deseo: Me quiero ver…
Todo inicia en el corazón del hombre, ¿lo has notado? Ves una imagen en las redes sociales o tu amiga te cuenta con tanta emoción y, aparentemente, con buena resolución, que se inyectó bótox, y tú puedes apreciar que quedó hermosa. Casi instantáneamente empiezas a maquinar cómo te verías. Conversas contigo misma pensando que esas ojeras o tu nariz imperfecta siempre te han molestado, y concluyes que no estaría mal si también lo hicieras, ¿qué es lo peor que puede pasar? Es solo bótox, y yo me quiero ver mejor.
Este flujo de pensamiento no es nuevo, en las primeras páginas de la Biblia encontramos una situación similar, de hecho, gracias a esa situación es que hoy tenemos el problema de deseos insatisfechos o deseos que empañan la voluntad de Dios. Me refiero a otra mujer como tú y como yo: Eva. En Génesis 3 observamos el mismo flujo de pensamiento que apeló a los deseos de Eva para finalmente comer el fruto que Dios había ordenado que no comieran, con el objetivo de ser como Dios (Gn 3:6). Lo que meditamos produce un deseo en nuestro corazón, en ese momento decidimos si algo es sabio o bueno de hacer y si agrada a Dios o si es necio y desagrada a Dios, quien nos ha creado, hablado y diseñado para un fin: hacer todo para su gloria pareciéndonos a Cristo.
Mente: ¿Qué hay de malo?
¿Sabes por qué esa idea te atrajo? Porque apeló a lo que has pensado o meditado, no necesariamente inyectarte bótox, sino en torno a cómo luce tu rostro. Quizás te has comparado con otras mujeres o, cuando te ves en el espejo, concluyes que no te gusta lo que ves. ¿De dónde viene este descontento? Sencillo, tomas como verdad tus pensamientos y no lo que Dios dice de ti. Incluso, algunas mujeres que juzgan a otras por inyectarse lo hacen porque ellas también lo han pensado, pero no lo han hecho por una cuestión moral, más que por amor a Dios. ¿Hay algo de malo en inyectarse bótox? Revisa tus motivaciones o deseos.
Lo cierto es, hermana, que el bótox puede ayudarte a mantenerte joven y verte bella, pero ¿es la voluntad de Dios? Además, ¿conoces los efectos secundarios de este procedimiento? ¿Sabes que es adictivo o se puede convertir en un ídolo? El bótox pretende regenerar las células con una toxina que impide temporalmente el movimiento de un músculo, es decir, una expresión de la cara para rejuvenecerla. Sus efectos son inmediatos, pero puede interrumpir la señalización nerviosa y puede provocar parálisis muscular en algunas personas. No hay vuelta atrás. ¿Has pensado en esto?
¿Cómo puedo decidir?
Si estás considerando inyectarte bótox o hacer algún procedimiento estético, hazte estas preguntas antes de decidir:
¿Cuál es tu motivación?
La Biblia enseña que fuimos creadas para la gloria de Dios (Is 43:6), por ende, hacemos todo para su gloria (1 Co 10:31). Pregúntate: ¿esto trae gloria a Él? ¿Deseo agradar a Dios? Toda vanidad es pecado, sobre todo la vanidad del cuerpo porque la juventud es un momento, así lo diseñó el Creador (Ecl 11:10). Pablo enseña que las mujeres se vistan con ropa decorosa, con pudor y modestia, como corresponde a las mujeres que profesan piedad (1 Ti 2:9-10). Pregúntate: ¿lo que haré proviene de un deseo vanidoso?
¿Tengo dinero para hacerlo?
La Biblia enseña que el manejo de nuestro dinero debe hacerse con responsabilidad (Lc 16:10-12; Pr 11:24-25). Pregúntate: ¿este gasto es prioridad? ¿Puedo pagarlo sin incurrir en deudas? ¿Qué beneficio traerá a la familia o bien la economía? Considera si este gasto es sabio y colabora a pensar en otros, antes que en ti misma.
Si eres casada: ¿Qué dice mi esposo?
La Biblia enseña que la mujer fue creada a causa del hombre (1 Co 11:9), por tanto, dice Pablo, el esposo es autoridad sobre su esposa (1 Co 11:10). Él debe cuidarla, pastorearla y amarla como Cristo lo hace con su Iglesia (Ef 5:25), y ella debe sujetarse a su esposo como la Iglesia debe hacerlo con Cristo (Ef 5:22). Pregúntate: ¿mi esposo está de acuerdo? ¿Qué beneficio traerá a mi matrimonio para que glorifique a Dios?
¿Qué dice Dios?
Si bien es cierto que no hay versículos bíblicos específicos acerca del bótox, sí hay versículos específicos sobre cómo debemos decidir y lo que debemos hacer. Por eso, mencionamos el corazón. Dios está interesado en nuestro corazón, y los principios que nos ha dejado son precisamente para que evaluemos nuestro corazón a la luz de quién es Él y nuestro llamado en Él. Por ejemplo, si la razón es por vanidad, mejor detengámonos. Si la razón es por un problema físico, oremos para pedir sabiduría y entreguemos nuestros problemas a Él (1 P 5:7).
La Biblia nos recuerda: «Engañosa es la gracia y vana la belleza, pero la mujer que teme al Señor, esa será alabada» (Pr 31:30). Ningún cirujano ni el bótox detendrá lo que naturalmente sucederá: la vejez. Las arrugas son un recordatorio de que este cuerpo dejará de ser para recibir un cuerpo glorificado (Fil 3:21); no somos de este mundo, por eso, la prioridad es trabajar en nuestro interior para cultivar un espíritu apacible y piadoso que es de gran estima al Señor (1 Pe 3:4). Guardemos nuestro corazón, cuidemos nuestro cuerpo diariamente. Ambas actividades traen gloria a Dios porque debemos guardar tanto nuestro cuerpo como nuestra alma, y demos gracias a Dios por cómo nos ha formado.
Para finalizar, el bótox quizá te ayude a verte bella, pero solo será por un momento, pues el rostro se hermosea con un corazón contento (Pr 15:13). Si valoras la Palabra de Dios y lo que Él dice acerca de ti, entonces trae a memoria su amor, la obra de Cristo y sus promesas, todo esto es suficiente para ver, escuchar y dar gracias a Dios por crearte, por tu salud y porque puedes alzar la voz para adorarlo, usar tus manos para servir a otros y tu mente para pensar en Dios de manera que lo agrades y glorifiques. Al final, eso haremos en la eternidad.
Aprende
¿Por qué es importante considerar qué motivaciones tenemos para realizarnos un procedimiento estético?
Vive
¿Cuál consideras que es la verdadera belleza de la mujer? Según este artículo, ¿crees que tu pensamiento está motivado por la cultura o por la Biblia?
Lee Salmos 139:13-17, 23-24. ¿Qué dice Dios sobre tu imagen? ¿Qué te impide pensar como piensa Dios de ti? Termina orando los versículos 23-24.
Lidera
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Recursos
https://www.gotquestions.org/Espanol/cirugia-cosmetica.html
https://www.avivanuestroscorazones.com/mujer-verdadera/blog/se-escapo-de-su-control/
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