Vivir en contentamiento: la vida de Katherine Schutz
Oct 05, 2022
- ¿Cómo encuentras contentamiento en medio del dolor y el sufrimiento?
- Conoce a Katherine Schutz, una mujer que hoy llamaríamos “con carácter”, firme en sus convicciones y amor por la Palabra; una mujer con contentamiento.
- A pesar de sufrir por tragedias y pérdidas, ella perseveró en ser madre para aquellos que no lo eran.
- Encontró contentamiento en hacer las buenas obras para las que fue llamada.
- El gozo de nuestra salvación es reflejado en las obras que realizamos hacia el prójimo que están informadas por la Palabra, y esto trae contentamiento a nuestro corazón.
- ¿Es Dios tu verdadera fuente de gozo en medio del dolor y el sufrimiento?
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Vivir en contentamiento: la vida de Katherine Schutz
En más de una ocasión nos hemos visto tentadas a creer que nuestro sufrimiento es único, que no existe otra persona que sufra tanto como nosotras, por lo que no podemos encontrar plenitud en medio de nuestro dolor, y es verdad. Solo Cristo puede ayudarnos a encontrar la plenitud y el contentamiento en nuestra vida, sólo Él comprende nuestro dolor.
Permíteme darte un ejemplo real de una vida en circunstancias difíciles y la manera en la que Dios obró en ella.
Mientras ocurre la Reforma, después de la proclamación de Lutero contra la iglesia católica romana, principalmente por anunciar que la salvación es por fe en Cristo y no por las obras del hombre, y por establecer como autoridad a las Escrituras sobre los cristianos.
Este movimiento ha sido el más importante en la historia del cristianismo. No solo afectó a los hombres, también a las mujeres en sus diferentes roles. En su mayoría, las mujeres creyentes eran monjas, como su único servicio al Señor. Entre estas mujeres que fueron afectadas por las Escrituras para conocer a Dios, encontramos a Katherine Schutz Zell.
¿Quién es Katherine Schutz?
Katherine Schutz fue llamada «Madre de los pobres y los refugiados» alrededor de los años 1600´s en Strasbourg, Alemania. Además, se le conoce por ser una escritora prolífica. Katherine era una mujer con educación, culta y con habilidad de palabra; trabajaba en la tapicería para mantenerse. Luchaba con las enseñanzas de la iglesia católica romana acerca del llamado a obrar, la misa y la confesión a sacerdotes.
Katherine escuchó la predicación de Matthew Zell, un ex sacerdote que ahora predicaba sobre la obra de Cristo y la fe en Él. El Señor abrió su entendimiento y vino a ser creyente, o protestante. Se casó con Matthew, a lo que ella dijo: sé que no se casó por mi belleza ni riqueza, sino porque ambos reconocemos que el matrimonio honra a Dios. Los Zell tuvieron dos hijos que murieron en su niñez, lo que trajo un gran dolor a su corazón, (aquí puedes profundizar sobre el tema del dolor y el sufrimiento https://www.reformadas.com/blog/el-sufrimiento-y-la-esperanza-en-cristo), pero Dios sacó fruto de la dura tierra de su sufrimiento cuando Matthew la comisionó a ser madre de los pobres y los refugiados.
¿Cuáles fueron sus buenas obras?
Ella no podía ser una madre de sus propios hijos, pero dedicó su vida a ser madre de otros. Visitó a los pobres, incluyendo a las víctimas de plagas y de lepra, así como a los encarcelados. Buscó ayuda para mejorar los hospitales en cuanto al cuidado y alimentación. Durante este periodo en Europa, los hospitales también eran lugares para los desamparados y refugiados, pero no eran instalaciones higiénicas y ni suficientes para la demanda que había.
Además, como consecuencia de su estudio de la Biblia, Katherine escribía eficazmente sobre las verdades de Dios. Quería difundir el evangelio y disipar errores a través de sus escritos. Su primera publicación fue una carta en la que ofrecía consuelo a las esposas de los refugiados. También compuso himnos y publicó canciones con mensajes de fe, basadas en los salmos y la oración del Padrenuestro; escribió catecismos, oraciones, y devocionales que envió a sus amistades necesitadas.
Sus escritos estaban llenos de la Palabra, sin importarle la controversia que estos generaban. Ella fue capaz de escribir porque su esposo la apoyaba, tanto que enviaba cartas a los reformadores, Lutero, Zwinglio, incluso amonestando a Lutero en una ocasión (amonestación que él aceptó), pero siempre aumentando sus conocimientos teológicos a través de ellos. La muerte de su marido afligió profundamente a Catalina. Aun así, continuó con su labor en favor de la gente de Estrasburgo hasta su propia muerte años más tarde. No deseaba ser recordada como mujer, sino por sus actos de amor y servicio a su ciudad.
¿Cómo podemos vivir en contentamiento?
La Biblia dice: “Pero la piedad, en efecto, es un medio de gran ganancia cuando va acompañada de contentamiento” (1 Ti 6:6). Esto define la vida de Katherine, usó sus dones y el amor de madre para ayudar al prójimo y para dar a conocer a Dios a través de su conocimiento de la Biblia.
No cabe duda que la motivación que procede de nuestros corazones es el motor de lo que hacemos. No es algo emocional, sino de una mente renovada por un corazón siendo transformado por la gracia del Señor. Esas obras en las cuales caminamos ya han sido preparadas por Él para su gloria y no la nuestra.
Muchas veces traemos excusas para no obrar lo que Dios nos dice, o porque no leemos la Biblia, o porque no buscamos en ella conocer esas obras. Sin embargo, nuestra vida cristiana no es para nosotras, es para Él. Perseveramos en buenas obras, en mejores matrimonios, en ayuda al pobre y al necesitado, en el conocimiento de Dios, porque todo resultará en su gloria y en nuestro contentamiento.
Aprende
¿Qué te enseña la vida de Katherine?
Vive
Lee 1 Timoteo 6 y reflexiona en cómo se ve tu contentamiento hoy.
¿Cómo estás mostrando al mundo que Dios es bueno, salva y perdona a pesar de las circunstancias?
Lidera
Reúnete con una amiga para que juntas hagan buenas obras en su comunidad. Animen a otras mujeres y enfoquen estas acciones en darle la gloria a Dios.
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