ASÍ COMENZÓ TODO...
Imagina por un momento que tienes en tus manos un tesoro invaluable, algo que puede transformar vidas, familias y comunidades enteras. Ahora, piensa en que millones de mujeres como tú no tienen acceso a este tesoro. Frustrante, ¿no?
Así me sentí yo hace algunos años cuando vi la alarmante escasez de recursos teológicos accesibles (gratis y prácticos) para latinas como tú y yo. Sin traducciones irrelevantes. Escritos por latinas para latinas.
¿Sabes? Siempre he creído en el poder transformador de la Biblia y he visto cómo la vida de las personas es transformada radicalmente cuando conocen a Cristo y lo obedecen. Esta convicción despertó en mí una urgencia que no pude ignorar: tenía que encontrar una manera de hacer que la Palabra de Dios fuera accesible para todas nosotras.
Así nació Reformadas. No fue simplemente una idea, sino que se convirtió en una respuesta a una necesidad que tú y yo compartimos. Tenía en mi corazón el anhelo de que cada una de nosotras tuviera la oportunidad de conocer a Jesús de una manera profunda y significativa para experimentar la esperanza que solo Él puede ofrecer para luego compartirlo con todos a nuestro alrededor.
Hoy, Reformadas es un faro de esperanza que proporciona recursos Bíblicos gratuitos; y sin embargo, esto es solo el comienzo. Es aquí donde entras tú.
Creo firmemente que en Jesús hay esperanza para América Latina y también en que tú eres parte vital de esta transformación para tu comunidad, tu familia y para ti, ¿te imaginas siendo partícipe de un movimiento que lleva la verdad liberadora de las Escrituras a cada rincón de nuestro continente?
Te invito a unirte a esta misión en la que tu voz, tu pasión y tu experiencia son invaluables. Juntas podemos ser parte de algo más grande que nosotras mismas: ver cómo la Palabra de Dios cambia vidas, una mujer a la vez.
¿Estás lista para ser parte de esta revolución de esperanza?
Reformadas no es mi historia, es nuestra historia.
